24 octubre, 2006

Tercera etapa: Puerto Madryn-Peninsula Valdés-Punta Tombo


Ya en la Patagonia, en el seno de la Naturaleza con mayúsculas, donde la vida animal dispone de parajes idílicos donde criar y reproducirse, donde los seres humanos asistimos atónitos al milagro de una ballena retozando con su ballenato, confiadas y seguras, en las aguas transparentes del Golfo Nuevo en la Península de Valdés, para, a otro día, contemplar en Punta Tombo a los pingüinos de Magllanes campar por sus respetos en medio de los paseantes que, eso si, conscientes de su responsabilidad y sabiamente aleccionados por los guías, les ceden respetuosamente el paso para su devenir bamboleante. Experiencias únicas que ensanchan el ánimo de quienes odiamos los zoos pero amamos a los animales. Y todo ello en el marco de unos paisajes que quitan el hipo por su magnificencia y su grandeza.

Hasta la "estepa patagónica" inmensa y vacía con
su inercia de millones de años de aridez se te va clavando en el ánimo hasta llenarte de su infinita quietud, de su soledad tranquila, de la certeza de que estaba allí antes de que la humanidad fuese un proyecto y estará allí cuando, al paso que va, la humanidad sea solo un vestigio.

No hay comentarios: