Ya estoy aqui... Buenos Aires es impresionante, desde el avión al atardecer la mirada no puede abrcarla... en tierra las luces de la ciudad se pierden en la lejanía hasta marear al espectador... en el mar, la impresionante desembocadura del Rio de La Plata deja sin aliento.
Hoy llueve, truenos y relámpagos acompañan mi paseo, me siento como en casa a pesar de todo, este hablar cantarín y lánguido de los bonaerenses es una caricia para mi oido. Sabía que me iba a gustar y estoy saboreando cada minuto.
En cuatro horas en los brazos de mi amante preferido. En cuatro horas, la dicha absoluta.
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