25 julio, 2008

Lisboa... mejor aún

Fué aún mejor de lo que esperaba. Un hotel genial en un sitio estupendo, cuatro días maravillosos en una ciudad del siglo XXI que no pierde cierto aire decadente y romántico. Ahora, en el mundo global, Lisboa es una ciudad mestiza, vestigio de la antigua metrópoli imperial son las decenas de razas que se adivinan en las caras de los transeúntes, en los bares, en los hoteles, en los transportes; una mezcla de lenguas y de acentos, de olores y colores.

Hay una luz especial en
Lisboa, en sus colinas y sus calles empinadísimas, en el azul del rio y en el verde de los jardines, en el rosa del Castello de Sao Jorge y en el amarillo y rojo de los tranvías, en el sorprendente caleidoscopio de las fachadas azulejeadas. Hay un discurrir distinto del tiempo en Lisboa, en el ajetreo por sus onduladas aceras, en el zumbido perpetuo del tráfico en los puentes a través del Tajo y en el pausado remanso de sus plazas y miradores, en el susurrar de las fuentes, en el bullicio de Chiado y en el andar lento y cansino de los moradores de Alfama. Hay una música siempre en Lisboa, una música que es el Fado y una música suave que te llega de todas partes, de la cadencia arrulladora del portugués. Muito obrigada Lisboa, voltarei perto.

3 comentarios:

Azul Flojo dijo...

IR A PORTUGAL ES UNO DE MIS VIAJES PERNDIENTES;ESPERO HACERLO PRONTO.
BIENVENDIDA, SE TE ECHABA DE MENOS POR EL CIBERESPACIO. ME ALEGRA Q LO HAYAS PASADO TAN BIEN AMIGA.
BSSSSS DE TU PALOMA VECINA DE BUHARDILLA.

Ana Gallardo dijo...

No lo dejes amigo, a veces visitar al vecino que tenemos cerca se va dejando porque "total, es ahi al lado". Portugal es un país cercano, similar, en el que te sientes "en casa", y los portugueses son personas amistosas que tratan a los españoles con una deferencia sorprendente. Seguramente en Portugal nada te sorprenda, pero seguramente mucho te conmueva.

Besos, me alegra encontrar la buhardilla habitada otra vez.

Arda dijo...

Yo tambien me enamoré de Lisboa hace seis años y parece que fue ayer. Tengo los versos de F.Pessoa, los fados de Amalia Rodrigues i de Misia (que te recomiendo si no la conoces). Amo Portugal porque se mete en la piel, porqué huele a especias, a caldo verde, a canela y a nostálgia.
Conocemos demasiado poco a nuestros vecinos y conocer es amar.